Programación

Llegando septiembre....

Está a punto de llegar y con él el final de las vacaciones para los que nos dedicamos a “estos menesteres”. Hoy, para mi, es Noche Vieja porque creo que nunca he medido el tiempo en años naturales sino en cursos escolares. Cualquier acontecimiento del pasado o cualquier proyecto para el futuro siempre lo ubico en el curso tal o en el cual… Por eso celebro esta Noche Vieja  a mi manera y mañana cuando me despierte me desearé  ¡Feliz Curso Nuevo!.
Y al igual que para muchas personas el 1 de enero es un momento para pensar, planear, proponerse retos, renovarse… a mi, llegando septiembre me ocurre lo mismo: me lleno de buenos propósitos, reflexiono sobre lo que quiero mejorar, lo que quiero aprender… en definitiva, intento organizar un poco mi vida a modo de Programación Personal o mejor de Programación Vital. Y es necesario que “me ponga con ella” antes de comenzar cualquier otra programación de las que haré en los próximos días
Entre mis Objetivos (que no dejan de ser buenos propósitos) algunos (o muchos) tienen que ver con mi actividad docente y como muchas personas hacen cuando llega enero yo en este “curso nuevo”  me voy a proponer estos cinco retos:

  1. Aprender idiomas: pero no inglés o francés (mucha falta si me hace, pero de momento tengo cosas más urgentes… ¡otra vez será!) quiero aprender el idioma de los silencios, el de las miradas tiernas o las desafiantes, el de las lágrimas de cocodrilo y el de las provocaciones, en definitiva, esos idiomas que me ayuden a escuchar todo lo que un alumno, un padre o un compañero me quiere decir aunque no sepa hacerlo en mi idioma (con palabras).

  2. Hacer ejercicio: entrenarme “por dentro” para las “carreras de obstáculos”, estar en forma para “apagar incendios” con eficacia, fortalecer los músculos para no fallar y “dar el empujón” adecuado a todos los que lo van a necesitar.

  3. Alimentarme mejor: No desaprovechar nada bueno, nutrirme  de los conocimientos de otros, compartir lo que encuentro, lo que tengo, lo que se, para crecer mucho, en conocimiento, en amigos… como persona.

  4. Reír y sonreír mucho: porque la risa/la sonrisa es contagiosa, terapéutica y milagrosa… este objetivo anual (¿o debería decir “cursal”?) es de los que más me gustan y me cuestan menos, por eso todos los cursos lo añado a la lista, para tener uno más fácil que me mantenga motivada.

  5. Mimar mi blog: Este objetivo nace del cariño que en poco tiempo le he ido cogiendo a este lugar en el que me siento libre para hablar, pensar y soñar. Y va a tener “descendencia” puesto que trabajaré las distintas asignaturas con el apoyo de un blog de clase. Podría haber puesto “mimar mis blogs”, pero no, los demás los cuidaré y los atenderé pero este espacio personal es el que de verdad quiero mimar.
Bueno, ¡pues ya está!, cuando termine el curso volveré aquí con la  memoria final y analizaré  el “grado de cumplimiento de la programación”. Si todo ha ido bien me sentiré muy satisfecha aunque no dudo que aparecerán como siempre muchas “áreas de mejora” que me servirán para, dentro de un año, llegando septiembre… volver a empezar.
Suenan ya las doce campanadas… os deseo a todos que este curso que comienza nos sorprenda con muchas cosas buenas. ¡Chin chin por el curso del 2009! y…
¡FELIZ CURSO NUEVO!
Feliz Curso Nuevo
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